Jaume Feliu
La Ortiga 1. Maravillas del Universo
Seguimos hablando de esta maravilla que es la Ortiga, lee el articulo anterior
Una vez tratada la parte científica y técnica de la Ortiga y su historial reciente, vamos a ver como se ha usado en el saber popular.
Ha sido amplia mente consumida como verdura en Andalucía, Asturias, Cantabria, Castilla-León, Castilla la Mancha, Cataluña, Valencia Madrid, País vasco, etc.
Se utilizan los brotes tiernos antes de su floración, escaldado o cocido. Se prepara de múltiples formas, en ensaladas, cocidas aliñadas con aceite y sal, en purés, en cremas, en caldos, sopas, en tortillas o revueltos. La misma agua que obtenemos de la ortigas se utiliza para preparar arroces, guisos y potajes.
Se elaboran también licores con ella como la conocida ratafía catalana.

Desde siempre se ha procurado que los herbívoros pasten en lugares donde haya ortigas y si no ha podido ser así, se les ha suministrad. Dice el refranero "El que quiera un buen cebón, que le de en mayo ortigón".
Con las aves de corral también ha tenido la ortiga un gran papel, en Andalucía se les preparaba una mezcla llamada "moyuelo" hecha de ortiga, pan seco y harina; con ella se favorecía la puesta de huevos en cantidad y calidad.
En Jaén, para engordar a los pavos, se les daba ortigas con garbanzos; en Huesca se daba ortiga a pavos y patos cuando mudaban las plumas.
Las abuelas siempre han suministrado ortigas a la familia en forma de "novenas" para motivos variopintos, pero con el éxito asegurado en la mayoría de los casos, como por ejemplo en problemas circulatorios, para el adormecimiento de las extremidades, para bajar la tensión, para depurar y "rebajar" la sangre en lugar de las conocidas sangrías.
En Cuenca han sido utilizadas desde siempre para fortalecer el corazón, se han hecho también "baños de asiento" con el aceite de freír ortigas para los problemas de hemorroides, también ha sido ampliamente utilizada para las piernas hinchadas, las varices y para parar las epistaxis (sangrados de nariz)
En Lugo las "meigas" la utilizaban para hacer abortos y como anticonceptiva. En el país vasco su utilización ha sido bastante opuesta pues se ha utilizado para acelerar el parto administrándola 9 días antes de la fecha en la que la madre deseaba parir. En Cataluña, en el Pallars subirá, para conseguir la concepción, pues administrada correctamente multiplica los óvulos que produce la mujer y con ello la posibilidad de fecundación.
En el tratamiento de gripes, resfriados, neumonías y catarros. En asma y bronquitis, ha tenido siempre un papel relevante, así como en problemas de garganta, ronqueras y afonías.
Dentro del sistema endocrino, ha sido ampliamente utilizada para reducir el colesterol, la Gota y el azúcar en sangre.
El agua de ortigas adelgaza y es un buen coadyuvante en regímenes proteicos con carencias nutricionales. Por ultimo es también utilizada desde siempre como tratamiento ancestral del reuma tanto en infusiones como en friegas con el aceite de ortigas o frotando la zona del dolor y produciendo un efecto urticante con la planta fresca, parece ser que el enfermo después de pasar el picor característico, refiere que el dolor ha bajado mucho.
En Arqromerterapia disponemos en jarabe y gotas de una mezcla de extracto de planta y raíces, que en su justa proporción solucionan problemas cada día.
También, como no, la ortiga tiene su parte de utilización mágica y esotérica. Por sus efectos urticantes se considera "defensiva". Las abuelas hacían muñequitos de trapo, que rellenaban de ortigas, y los ponían en las vestiduras o los cochecitos de los niños para protegerlos del dañino "mal de ojo", y también se elaboraban muñecos mayores o simplemente cojines que se ponían en un altar en la casa para protegerla de los malos espíritus .
Más allá de nuestras fronteras, en Nepal existió un Monge que predicaba por toda la India y la china, andando de pueblo en pueblo y enseñando sus creencias a todo aquel que lo quisiese escuchar. Le llamaban "el Monge verde" por su color verdoso debido a que su única alimentación consistía en sopa de ortigas, allá donde iba tomaba plantas y estas lo alimentaban; su longevidad fue notable, tanto como su único alimento, LA ORTIGA.
Si en vuestra casa o alrededores, crece la ortiga, no la tengáis como esa la mala hierba que pica, cuidadla como el mayor de los tesoros, pues como decía mi maestro "si crece cerca de ti es que la necesitas" y con la ortiga seguro que no vas desencaminado.